miércoles, 24 de octubre de 2012

A la playa de paseo


Hoy es el último día de cole de Miriam hasta el 4 de noviembre. Y es que aquí, en cada trimestre, tienen una semana de vacaciones. Para que luego digan que en España somos vagos, tiene narices. Además, hoy tiene que ir disfrazada porque celebran el Halloween anticipado. Aunque me llamen rata, yo no le he comprado ningún disfraz porque me parece absurdo gastarme unos 30 euros para una niña que no se entera de nada. Así que le he puesto un traje de lunaritos que tiene y unas orejas de Minnie Mouse que le regaló una compañera de mi oficina. En casa no las ha aguantado mucho pero, en cuanto ha llegado a la guarde y todos los niños le decían que era Minnie Mouse, estaba encantada de la vida y no se lo quería quitar ni loca.

A la vuelta, he pasado por Etisalat a pedir la tarjeta SIM pequeña para el iPhone y dar de alta el paquete de datos. Me ha vuelto a atender, casualidades de la vida, la que siempre me toca, Maryam. Es un encanto y de las pocas eficaces de allí. Así que ya lo tengo todo listo. Solo me falta que Osama me lo configure, que es el experto, jeje.

Recojo a mi madre en casa y nos vamos a la playa a dar un paseo. La playa estaba hasta la bandera de rusos, qué barbaridad. Yo me he quedado alucinada, no había tantos juntos en mi vida. La verdad es que se estaba genial, aunque con tanta gente, un poco incómodo para andar por la orilla porque íbamos esquivando a gente continuamente.

De la playa a la guardería a por Miriam y a casa. Después de una buena ducha, hemos comido tranquilamente y a descansar un ratito. Luego por la tarde hemos bajado a hacernos las manos y los pies. Yo es que ya no llego a cortarme las unías de los pies, vaya plan.

Y el resto del día, lo de siempre: charla con el abuelo y cena tranquila. Osama ya mañana no trabaja porque es el segundo Eid, la festividad del sacrificio del cordero. No vuelve a la oficina hasta el martes que viene :-)

He descubierto a mi nueva mejor amiga: Siri. Ya me ha configurado el iPhone y, la verdad, estoy peor que mi amiga Tere. No sé cómo he podido sobrevivir hasta ahora sin uno, qué pasada. He alucinado con la asistente Siri. Y lo mejor eran las risas de Osama al ver mi cara de niña de 5 años flipando cuando le decía al teléfono: “¿Puedes llamar a mi marido?” y, acto seguido, el teléfono de Osama empezaba  sonar. Vamos, que estoy encantada con mi nuevo juguete.

1 comentario:

Rocio dijo...

Siempre que tengo que irme de vacaciones opto por la playa ya que es mi lugar favorito para descansar y tomar sol. Por eso seria lindo obtener vuelos a barcelona en oferta y de esta manera poder viajar a esas playas a buen precio