Se termina Octubre

Hoy despedimos el mes de Octubre, qué alegría más grande. No es que le tenga manía ni mucho menos. Pero significa que estamos más cerca de Navidad :-)

En la oficina hemos tenido otro día tranquilito, menos mal. Parece que esta semana y la que viene van a ser muy poco productivas, así podemos adelantar cosas con calma. Aprovecho también para hacer el curso online de digital que estamos haciendo todos los de la agencia. Para nosotros es bastante básico pero siempre se aprende algo nuevo.

Han venido los de Nervora, uno de los proveedores, para ponerme al día de un proyecto que están haciendo para Philips. Cosas que pasan con algunos clientes.

Después de comer tocaba despedir a Anil, un miembro del equipo de investigación. Se vuelve a India por circunstancias familiares. Espero que se resuelva pronto y podamos tenerle de vuelta porque es un encanto. A mí me ayudó mucho nada más llegar.

Antes de salir he chateado un ratito con mi madre, que ya esta noche vuelven de la Argentina. Estoy deseando hablar con ellos, a ver el acento que trae.

Por la tarde, he ido con Miriam al Dubai Mall, que había quedado allí con Almudena, una amiga de Jerez que ha venido de turismo con otros amigos. Están los 4 flipados con el fin de semana largo que se han pegado en Dubai. No dan crédito al nivel de vida. Ya le he aclarado yo que es muy distinto cuando se vive aquí. Al menos, en mi caso. Es verdad que a veces puede ser fácil perder la cabeza con tanto plan de lujo alrededor. Pero nosotros preferimos vivir de forma más normal, sin perder la cabeza, y aprovechar la oportunidad para ahorrar.

De vuelta a casa, nos hemos vuelto a echar unas risas con la loca de Miriam haciendo de las suyas. La verdad es que ahora la disfrutamos mucho porque está cada día más payasa.

Mañana, más. 

Se van los invitados

Dios mío , lo que me ha costado levantarme; no podía con mi alma. Pero siempre ayuda pensar que este fin de semana tiene, esperemos, 5 días. Ahora viene la segunda fiesta musulmana del año: el Eid al Adha. Ya lo he explicado los años anteriores. Es también conocida como la festividad de la matanza del cordero. Como siempre, depende de la luna, y aún no sabemos si serán esos días u otros. Pero la experiencia es un grado y podemos anticipar que será fiesta el domingo, lunes y martes. Maravilloso puente en el que nos quedamos sin planes por culpa del maldito Air Berlin.

Aprovechando que es un día tranquilo, he podido contestar y escribir algunos correos personales, que tengo a mis amigas/os un poco abandonadas/os. También he ordenado algunas cosas que tenía pendientes.

En el coche, no paro de escuchar el nuevo disco de Coldplay. Lo compramos el viernes por la tarde y, desde entonces, no me importa lo más mínimo que haya tráfico al ir a la oficina. Por ahora, la que más me gusta es Princess of China, que canta a dúo con Rihana; no sé cómo aún no he rayado el cd de tanto escucharlo.

Osama ha tenido su examen por fin y, al parecer, ha ido bien. Me imagino que así será porque no es de los que exagera su optimismo; suele ser bastante sincero consigo mismo. Ahora sólo hay que esperar 6 semanas más o menos para saber los resultados. Al menos, vuelve a ser sociable, jeje.

He ido a casa a recoger a Miriam y a darnos un paseíto por la playa, que el tiempo acompaña bastante. Nos hemos cruzado por el paseo con unas cuantas ninjas de Arabia Saudí. Llamamos así a las que van enteras de negro y que sólo se le ven los ojos. Como en el país vecino tienen más vacaciones por la festividad del cordero, pues se vienen a pasar los días a Dubai. Este año se ve mucha más presencia de Saudíes debido a la situación en Egipto, Bahrain, Syria, Libia, etc. Mejor para Dubai, que se nota que se recupera económicamente.

De vuelta a casa, Cecile ya había llegado de sus recados y Xavier llegaba al poco rato. Han estado recogiendo que esta noche duermen en el hotel que les ha reservado la empresa. Antes de irse, nos han dejado un lote de productos L’Occitane, que me encantan.  Me da penita que se vayan pues hemos estado divinamente. Menos mal que en marzo vienen otra vez y, DM, será con niña. A ver si nosotros nos podemos escapar a verles a Bahrain.

Luego hemos charlado vía Skype con Marta, Marcos, Tere y Juan. En estos ratos es cuando me da mucha pena no estar allí, pero ya nos queda menos para que llegue Navidad. Y ya mejorarán las cosas para mudarnos de nuevo a la madre patria.

Antes de meterla en el baño, nos hemos hartado de reír con ella. Y es que ahora le ha dado por gatear con los pies en lugar de las rodillas; parece una araña, jajaja. Menuda pieza está hecha. Eso sí, las risas están garantizadas. No me extraña que caiga rota en la cuna, si es que tiene que terminar agotada. Igual que nosotros de seguirla.

Para celebrar que Osama ha terminado el examen, nos hemos ido a cenar a un tailandés para el que compramos un cupón de esos de descuento por Internet. El sitio estaba totalmente vacío, éramos los únicos clientes. Pues aún así han tardado una eternidad en servirnos la comida, desesperante. Normal que no tengan clientes. Al menos, hemos pagado una miseria y la verdad es que la comida estaba buena.

Esto es lo que ha dado de sí el domingo. 

Tarde de playa

Mientras los chicos estaban a otras cosas, Osama con su estudio y Xavier haciendo unos recados; las chicas hemos estado charlando sobre bebés y las rutinas. Cecile me iba preguntando todas las dudas que le pasaban por la cabeza, como si yo fuera una experta. Pero es verdad que me ha hecho recordar cuando yo estaba en su lugar y parece que han pasado 5 años desde entonces.

Hemos comido lo más tranquilo que hemos podido pues Miriam no ha dormido mucha siesta hoy. No sé qué le pasa pero tampoco ha querido merendar mucho. Por un día tampoco le pasará nada, ya he pasado esa fase de obsesión porque coma. Ahora ya come muy bien y no está baja de peso.

Nos hemos ido a pasar la tarde en la playa con Emilie. Sorprendentemente, hace un viento bastante fresquito y ni siquiera hemos puesto un pie en el agua. Es curioso cómo las chicas somos chicas desde que nacemos. Miriam le hace mucho más caso a Xavier que a Cecile y le pone unas caras de tonteona, que nos partimos de risa con ella, es alucinante.

Mientras ellos se han quedado otro rato más en la playa, nosotras nos hemos vuelto en cuanto ha atardecido. Hoy tocaba hablar con tía Blanca, que tiene en casa a mi abuela y a tía Rosario. Se partían de risa viendo bailar a la mocosa, que es la última gracia que hace. De pie agarradita al sofá, mientras yo le canto y toco las palmas, da saltitos de arriba abajo, me parto. Y también le ha dado por vaciar la estantería y tirar todas las cosas al suelo. Cuando ha terminado con las dos baldas de su altura, mira para arriba y se intenta empinar para coger lo que hay. Y, cuando le riño o le digo que no haga una cosa, la tía se enfada ya, menuda nos espera.

Lakshmi ha llegado con buenas noticias: su hijo ha encontrado trabajo en un hotel nuevo. Está muy contenta, no es para menos. 

Después de cenar le he mandado a los argentinos unas fotos de la boda, que se las querían enseñar a unos parientes que tiene mi madre en Buenos Aires, así se actualizan con la familia. Y justo después de eso, me he ido a la cama, que estoy muerta y mañana empezamos la semana. Osama ha estado repasando, que tiene el examen mañana, por fin. Ya volverá a una vida normal. 

Cenita muy agradable

Después de haber estado toda la semana despertándose a las 6-6:30, hoy hemos amanecido a las 7:50, todo un logro. Además, se levanta de muy buen humor, con lo cual ha dejado dormir bien a Cecile y Xavier.

Al verla, han flipado claro, porque la última vez que la vieron fue a finales de agosto, hace mucho. Hemos desayunado como marqueses mientras nos íbamos poniendo al día. La verdad es que se les echa mucho de menos, sobre todo Emilie.

Mientras Miriam dormía la siesta, que hoy ha sido bien larga, yo he preparado una lasaña y una ensaladita para nosotros. De postre, unos macaroons que nos han traído los franceses, riquísimos.

Nada más darle las frutas a Miriam, nos hemos ido a dar un paseo por la playa, que se estaba divinamente. Ya casi no hay humedad y están bajando las temperaturas, así que hay que aprovechar el buen tiempo.

Ya en casa, hemos charlado un ratito con el padrino antes de empezar con el baño. Después de acostarla, nos hemos empezado a arreglar para ir a cenar con Emilie y Vassilis, el antiguo jefe de Xavier. Ha venido Lakshmi para quedarse con Miriam.

Antes de irnos, he entrado un momento en su cuarto y la veo de pie, frita con la cabeza apoyada en la barandilla de la cuna. Si es que no se puede ser más cabezota, vaya personaje.

Hemos cenado en un libanés en Souk Al Bahar. Conseguimos que nos sienten en la terraza, que se está muy bien y tienen vistas a la famosa fuente. La verdad es que nos lo hemos pasado muy bien, riéndonos mucho. A ver si vienen más a menudo a vernos  y la repetimos pronto. Aunque a Cecile le queda ya poco para poder volar, pues está de 6 meses. Ya iremos nosotros, si podemos, cuando nazca la pequeñaja. 

Curso todo el día

Hoy he salido de casa con cargo de conciencia porque Miriam seguía con fiebre esta maniana y yo tengo un curso de 10:00 a 16:00. Osama tiene el día libre hoy para estudiar desde casa así que al menos me va poniendo al día, gracias a las nuevas tecnologías.

El curso es sobre el sistema de planificación que se usa internamente en Carat. Ha estado muy bien porque Patricia lo ha hecho muy ameno. Incluso nos ha tirado chocolatinas si acertábamos las preguntas, muy graciosa. Eso sí, nos vamos a tener que pegar el resto del fin de semana a dieta, jajaja.

Osama me iba mandando mensajitos diciendo que Miriam no había tenido fiebre en todo el día, incluso me ha mandado un vídeo, me partía de risa. Al menos me he sentido menos culpable.

Después del curso me he ido directa a casa, aunque tenía hora para cortarme el pelo. Pero la he anulado para el siguiente fin de semana. Nos hemos bajado al patio y se lo ha pasado pipa con otras 3 niñas. También estaba Christine, la mujer de mi ex compañero Joe, con su hijo Edgar, que ha estado pachucho también esta semana. 

Ha terminado el día agotada, mejor para nosotros porque ha caído redonda en la cuna. Y luego han llegado nuestros invitados de este fin de semana: Cecile y Xavier. Son unos amigos franceses que conocimos a través de Emilie. Vivían en Dubai hasta principios de septiembre, que se han mudado a Bahrain por un año. Están esperando una niña para finales de Enero, así que dicen que este finde harán prácticas con Miriam, jajaja.

Charlamos un rato en el salón antes de que se vayan con Emilie y otro amigo a tomar algo. Ya tendremos tiempo el fin de semana para seguir poniéndonos al día.

Nosotros a las 23:30 estamos ya de camino a la camita. 

Vaya semanita

Siento que esta semana no estoy escribiendo mucho pero es que está siendo un no parar. En la oficina andamos de reunión en reunión y, a la vez, lanzando dos campañas: una para Kellogg's y otra para Disney. También he tenido que preparar un par de presentaciones para clientes nuevos, a ver si salen. Hay una, para el día nacional, que me gusta especialmente. Si sale, os contaré más detalles.


Aprovecho que hoy está siendo un día más tranquilito para ponerme al día con el Blog, que lo tengo un poco abandonado.

Por las tardes, no estoy haciendo nada especial. O bien me bajo al patio con Miriam o algo algún recado en el mall. Y es que la pobre enana está un poco fastidiada con los dientes. Ayer ya incluso llamé al médico, pecando de primeriza total. Pero es que no sé si es normal que tenga casi 38 de fiebre. Ya me han aclarado que, por lo visto, hasta 38 no se considera fiebre en un bebé, así que me quedo más tranquila. Aunque esta noche, antes de meterla en la cuna, le he vuelto a poner el termómetro y ya tenía 38.4. La verdad es que da penita a ratos porque está muy tontina, no se ríe demasiado, babea mucho y, a veces, incluso lloriquea llevándose las manos a la boca. Ayer por la mañana, desde las 4:30, estuvo despertándose cada 20-30 minutos llorando. Me imagino que es lo que toca a esta edad.

Y los argentinos parece que se lo están pasando muy bien. Hoy por fin, después de muchos intentos, he conseguido chatear con ellos. Y no he parado de reírme con la pava de mi madre y su acento argentino escribiendo, creía que me daba un ataque. Me da a mí que mi padre se la va a tener que traer a rastras, jajaja.

Ya tenemos el fin de semana a la vuelta de la esquina. Y éste promete pues tenemos varios planes concentrados. El pobre Osama se quejaba porque justo este fin de semana es el previo al examen, así que estará encerrado en la oficina estudiando como un loco. Menos mal que el domingo ya se termina.

Omán tampoco

Parece que lo de la infusión ha hecho efecto porque me he levantado mucho mejor. Esperemos que dure.

De nuevo, nos quedamos las dos mano a mano porque Osama se encierra en la oficina a estudiar y ni siquiera va a venir a comer.

Por la mañana nos hemos quedado en casa. Miriam está obsesionada con la estantería de su cuarto; le encanta gatear hasta ella, ponerse de pie agarrada a las baldas y empezar a tirar todo lo que hay en ellas (sólo juguetes de peluche).

Después de comer, nos hemos ido las dos a dormir la siesta, cada una en su cuarto. Pero, una hora después, el vecino de arriba nos ha despertado; debía estar jugando al juego de las sillas o algo así, cuánto ruido. He intentado que se volviera a dormir pero no ha habido suerte.

En teoría, íbamos a ir a la playa con Emilie, pero viendo lo cansada que está la enana, nos hemos quedado por abajo dando un paseo. Allí hemos visto a Joe con su mujer y su hijo, que se acaban de mudar a la torre de al lado nuestra. A las 18:00, por fin, se ha quedado frita, hasta las 18:30 que la he despertado, con toda la pena del mundo. Pero es que sino, no va a dormir luego.

Como no podía ser de otra forma, también nos quedamos sin ir a Omán; el hotel que queríamos está lleno. Así que nos toca quedarnos en Dubai 5 días seguidos. Gracias de nuevo, Air Berlín, por fastidiarnos el puente.

Yo pensaba que había esquivado el resfriado pero va a ser que no porque no he parado de estornudar y moquear en toda la noche. Después de cenar, me tomo otro té de esos de naranja y me chuto un panadol antes de meterme en el sobre. A ver qué tal mañana. 

Tarde de paseo

Hemos amanecido a las 7:50, aunque Miriam ya llevaba un rato despierta jugando, suerte que es buena y se entretiene sola en su cuna.

Dejamos a Osama estudiando en casa y nosotras nos bajamos al patio a jugar un ratillo. Ha estado encantada de la vida arrancando el césped. El día menos pensado nos echan de allí. Hacía bastante viento así que nos subimos pronto.

Han venido a comer los padres y hermanas de Osama. Pero hoy hemos pedido comida a un restaurante libanés de al lado de casa, no daba tiempo a preparar nada.

Después de comer, nos hemos ido con Ban a dar un paseo por JBR. Es la última vez que vamos en fin de semana, ¡cuánta gente! Menos mal que hemos tenido suerte aparcando pero, para salir, hemos tardado unos 20 minutos.

Ya en casa, hemos charlado con Ana por fin, con el padrino y un ratito con tía Blanca. Aunque Miriam ha estado cansada y a punto de dormirse durante toda la tarde, al final no durmió nada, así que ha caído inconsciente mientras se tomaba el biberón, que ni siquiera ha terminado.

Antes de dormir, me he tomado una infusión de naranja, que creo que me estoy pillando un resfriado, porque no paro de moquear. Espero que sea una falsa alarma.

Buscando alternativas

Hoy hemos empezado el día divinamente en la oficina: con un desayuno por todo lo alto.Al parecer, se organiza una vez al mes y cada vez es distinto. El de hoy era de estilo New York, con muffins y bagels. Es una forma de integrar a los diferentes departamentos. Gracias de nuevo a Dana que se encargado de todo.

El resto del día ha pasado de reunión en reunión. Primero con Chris, de Valueclick, que ha interesado especialmente a Hannan, no por las posibilidades publicitarias, sino porque le ha parecido muy guapo. Es la primera vez que dedica más de 15 minutos a un proveedor. Obviamente, se lo hemos echado en cara y nos hemos reído de ella todo lo que hemos podido. La muy ilusa creía que no nos habíamos dado cuenta.

Después nos teníamos que sentar con Roxie para ver la estrategia del siguiente lanzamiento de Kellogg’s pero se ha cancelado porque el servidor se está volviendo loco y no paran de desaparecer carpetas; hoy le toca al equipo de offline que ha perdido todos los archivos. El pobre Luis, del departamento de informática, no para estos días. Esperemos que aparezca todo de nuevo, sino vaya faena.

Para cerrar el día y la semana, reunión con Avent. Están muy contentos con los resultados de la campaña en Facebook, no es para menos. Hemos estado esperando a Kinga un buen rato, mientras hablábamos con Mohammed del mar y las flores. Al final, no ha aparecido así que hemos perdido el tiempo como tontos.

He vuelto a la oficina para cerrar y largarme, que ya voy tarde.

Recojo a Miriam en casa y vamos andando a Dnata, una agencia de viajes cerca de casa. Por el camino se ha quedado frita, que por lo visto había dormido muy poca siesta hoy. Como es de esperar, todos los súper paquetes de vacaciones están agotados. No es para menos. Es uno de los dos puentes que tenemos al año y, claro, todo el mundo se larga. Parece que hay una posibilidad en Omán pero no nos lo confirman hasta el sábado. Con la “suerte” que estamos teniendo, me da que no va a poder ser.

De vuelta a casa, Miriam iba encantada de la vida por la calle, canturreando. Qué bien se lo va a pasar en Jerez, todo el día en la calle. Lo bueno es que el tiempo está mejorando por días, es increíble que ya no haga tanto calor, espero que dure. Así que ahora podrá pasar más tiempo de paseo.

Antes de meterla en el baño, hemos charlado con tía Blanca un rato. Y, después de acostarla, he cenado un sándwich con Osama que luego se vuelve a estudiar. Menudas ganas de que llegue el 30 de octubre, pobre, no ve la hora. Y yo tampoco J

Berlín cancelado

Hoy estoy de un humor de perros. Air Berlin, desde ya la peor compañía aérea del mundo, ha cancelado nuestro vuelo de vuelta. Lo pasan al día siguiente y se quedan tan anchos, simplemente nos mandan un correo electrónico para avisarnos, todo un detalle. Les he llamado hecha una furia para ver qué ha pasado pero no me aclaran el porqué de la cancelación; se limitan a decirme que ha afectado a más pasajeros e intentan quitarle hierro al asunto diciendo que es sólo un día. Un día que no tengo de vacaciones porque ya los tengo todos adjudicados para Navidad.

El caso es que nos han arruinado el viaje, una gracia. Lo que más me fastidia es que no íbamos solos, habíamos quedado allí con Marta y Marcos. Con lo que nos apetecía el plan. He estado incluso mirando otros vuelos, aunque sea con escala, pero con tan poco tiempo, nos sale por una pasta: 1,600 euros nada menos, sólo los billetes.

El resto del día ni me acuerdo de lo que he hecho. 

Voto por correo

Esta mañana he dejado a Miriam de pie en la cuna e intentando abrir la cortina para mirar por la ventana. Menos mal que no me ha visto y seguía jugando. No porque le dé pena que me vaya, ni le importa, sino porque entonces ya no se quiere quedar sola en su cuarto.

Desde la oficina, aprovechando que tan temprano suelo estar tranquila, le he escrito un largo correo a Ignacio, un nuevo lector que está a punto de venirse a Dubai.


Luego ya se  ha liado la cosa. Hemos tenido un par de reuniones con soportes. De hecho, he flipado con uno de ellos. No lo conocía, o al menos no me acuerdo, pero él se sabía mi vida entera, incluso me ha preguntado por la enana. Después de presentarnos su red, hemos estado cotilleando sobre la industria, los últimos cambios en las agencias, etc. Si es que este mundillo es demasiado pequeño.


Hoy toca comer delante de la pantalla para revisar una presentación que tenemos mañana. Así también aprovecho para leer las noticias, que aún no me ha dado tiempo.

Antes de irme a casa, tenemos una reunión interna para discutir sobre Masafi. Estamos preparando una presentación general. Parece que es el día de la desaparición de archivos. Leila ha perdido una carpeta entera con todos los ejemplos internacionales y Anouk ha perdido la presentación de Masafi. Esperemos que Luis pueda recuperarlo todo.

Sorpresa, al llegar a casa me encuentro que Osama me abre la puerta. Ha estado todo el día en Abu Dhabi y ya se queda en casa estudiando. Miriam y yo nos hemos ido a pedir el voto por correo, que no quiero que me pille el toro. Y luego a comprar un par de cosas que se me olvidaron ayer.

Antes del baño hemos charlado con tía Blanca, que nos ha puesto al día de los argentinos. He intentado chatear con ellos por Messenger pero hemos estado como el perro y el gato. Mañana vuelan a Iguazú. Por lo que cuentan, deben estar pasándolo muy bien.

Una vez acostada Miriam, que hoy ni se ha podido terminarse el bibierón, ha caído redonda; le he preparado puré para esta semana. Y a dormir, que entre semana a las 10 de la noche ya no soy persona. 

Vecinos poco cívicos

Me ha despertado Miriam llorando a las 5:30 de la mañana. No sé qué le pasaría. Siempre culpamos a los dientes pero, la verdad, no tiene ni una mínima puntita fuera, así que igual ha sido una pesadilla. Lo que sé es que yo no he vuelto a pegar ojo.

En la oficina parece que es el día de aprobar los planes porque hemos recibido tres. Como Nilesh está de vacaciones, me ha tocado traficar un par de ellas, así que ya sé utilizar el DF6.

He ido a comer con Claudine a Sumo, un japonés en versión barata al lado de sus nuevas oficinas. Creo que establecemos los domingos para comer juntas.

De la oficina me he ido a casa a recoger a Miriam y Lakshmi y nos vamos a hacer la compra a Carrefour, que ya toca. Lo peor, como siempre, ha sido llegar a casa. Resulta que en el aparcamiento hay dos carros para poder subir las cosas a los apartamentos. Pues, desde que nos mudamos hace 8 meses, aún no he visto ninguno. Los pobres chicos de seguridad están hasta las narices porque, cada vez que los reclaman, los vecinos se ponen bordes y les tratan de forma irrespetuosa, como suele pasar en este país. Así que me he vuelto a pillar el mismo cabreo de siempre mientras subo las bolsas cargada como una mula. Desde luego, hay gente muy poco cívica por ahí.

Como los ciber-abuelos andan bastante lejos, nos quedamos sin la charla diaria. Pero aprovechamos para hablar con el padrino, tia Blanca y, una vez acostada la mica, con tia Merche.

Hemos cenado una cremita de calabaza muy rica, que por fin me he vuelto a poner con la cocina. Y a dormir prontito, que estoy muerta. 

Tarde con Emilie

Hoy nos hemos pegado todo el día sin Osama. El pobre ni siquiera ha venido a comer. Menudas ganas de que llegue el 30 de octubre y se termine todo.

De la mica no me puedo quejar, que se ha portado muy bien, aunque ha dormido poco después de comer.

Por la tarde, nos hemos ido a Festival City para quedar con los padres de Osama, que ayer la vieron poquito. Casi me la como con su trajecito de flores puesto, está guapísima. Está mal que yo lo diga pero, siendo su madre, ¿qué se puede esperar?

El resto de la tarde hemos estado en casa, que ha venido Emilie a vernos. Como ha estado en España por trabajo, nos ha traído 4 cajas de cereales, así que ya tenemos reservas. Ya en Navidad nos traeremos más.

Ahí dejo una foto de las dos, que salen muy guapas.

Hemos visto una peli de Nicolas Cage muy antigua y, antes de irme a dormir, he hablado por fin con mi amiga Mique, que tuvo mellizas hace tres semanas. Estoy deseando verlas en diciembre. 

Otr@ amiguit@ en camino para Miriam

Pues sí que ha funcionado porque hemos amanecido hoy a las 7:50, no está mal. Claro, se ha levantado con las pilas bien cargadas. No hemos parado en toda la mañana.

Después de comer, la he acostado y así podíamos terminar de preparar la comida. Los solomillos han salido, sorprendentemente, muy ricos; más de lo que yo me esperaba. Aunque, como soy tan crítica, ya he pensado en una mejora para que la próxima vez no estén tan secos.

La mini-marquesa ha dormido hasta las 4 de la tarde, que la he despertado. Entre sueño y sueño, ha tenido una buena fiesta en su cuna con su osito.

Por la tarde, mientras Osama se volvía a encerrar en la oficina para estudiar, nosotras hemos quedado con unos amigos en una terraza. Stephanie y Michel, que se casaron en junio en París, nos han dado la noticia del mes: están embarazados. Así que viene un nuev@ amiguit@ para Miriam. Aún no saben lo que es.

Antes de irnos a casa, que aún era prontito, nos hemos dado un paseo por la playa. Aunque esta semana el tiempo ha empezado a mejorar, hoy volvemos a la humedad. Así que el paseo ha durado menos de lo previsto. Ya decía yo que era pronto para que mejorara tanto el tiempo. Demasiado bonito para ser verdad.

Como todas las tardes, hemos charlando con mis padres, que se van mañana a Madrid y luego siguen para Argentina.Y después ya llega todo rodado: baño, biberón, a la cuna y, detrás, nosotros. 

Otra vez jueves

Parece mentira pero ya estamos a jueves. Esta semana ha volado. Espero que siga siendo a así y llegue diciembre pronto para irnos a los jereles.

Otro día lleno de reuniones, para variar. Hemos empezado sentándonos con Roxie para preparar un lanzamiento de Kellogg’s para el próximo año.

Luego han venido las chicas de Yahoo, con las que volvemos a perder el tiempo con los datos de Avent, que siguen sin cuadrar porque han debido de implementar mal los tags.

Iba a ir a comer con el resto a un libanés cerca de la oficina pero al final me he quedado actualizando  el informe de Avent, que casi termino haciendo logaritmos. Pero al final ha salido bien y los resultados han mejorado con los cambios de esta semana. Se los hemos presentado al cliente y se ha quedado contenta, menos mal.

Y a las 16:30 me largo zumbando a casa, que ayer casi no estuve con Miriam y esta mañana la había dejado frita.

Me la he llevado a Waitrose a hacer una mini-compra, que mañana vienen los suegros y cuñadas a comer. Me voy a aventurar y hacer unos solomillos con hojaldre, a ver qué tal salen.

En casa, como todas las tardes, hemos hablado con los ciber-abuelos. Miriam estaba especialmente simpática, no paraba de canturrear y charlotear su “ta-ta-ta-ta-ta-ta”. Aprovechando que estaba de tan buen humor, la he bañado un pelín más tarde así, con suerte, mañana no amanece tan temprano. Veremos si funciona.

Osama sigue estudiando a tope el pobre. Ha llegado justo para cenar y ver una peli en Apple TV: Horrible Bosses. Es divertida pero me la esperaba mejor, además de que es un poco previsible. Pero al menos empezamos el finde totalmente desconectados. 

Día de la Hispanidad

Feliz Día de la Hispanidad a todos. Cuando se está fuera de Espana, se celebra de otra manera. Al menos, es mi caso.

También es el día de la Virgen del Pilar, así que muchas felicidades a todas las que se llaman así.

Esta semana está siendo agotadora, no paro un segundo. Lo bueno es que ya estamos a miércoles y ni siquiera me he enterado; los días vuelan.

En la oficina andamos aún con el plan de Disney, pues al final no han aprobado la idea que Isobar presentó. Una pena porque habría sido un puntazo hacerlo; otra vez será.

El pobre Mahmoud anda bastante estresado hoy porque ha perdido toda la  mañana en un concurso con Emirates NBD, uno de los bancos locales. Ha llegado después de comer y con un dolor de cabeza que no podía casi ni abrir los ojos, pobre.

Yo he salido a las 4 a todo correr para llegar a casa, estar un ratillo con Miriam y cambiarme para ir con Ángel a las copas que organiza la Embajada en Abu Dhabi. Hacía un par de años que no iba. De hecho, la última vez que fui aún se celebraba en casa del embajador;  éramos pocos por aquel entonces. Ahora, que ya somos más de 1,800 españoles en los Emiratos, se organiza en el Abu Dhabi Country Club.

Ha estado muy bien esta vez porque primero han puesto el himno nacional de Emiratos, seguido del Español (qué bien suena cuando se está lejos) y luego el embajador nos ha dirigido unas palabras sobre los últimos negocios bilaterales entre ambos países. No sabía que el Rey Juan Carlos y el Príncipe Heredero de Abu Dhabi habían inaugurado Gemasolar, la primera planta en generar energía solar 24 horas. Está ubicada en Sevilla y supongo que dará un buen empuje a la economía andaluza.

Allí hemos estado con Rosario, que hacía mucho que no la veía. Ya hemos quedado que, cuando termine Osama su examen, tenemos que organizar una cena en condiciones. También hemos visto a Lula y Manuel, que ya llevan en Dubai 10 meses, increíble cómo pasa el tiempo. Y hemos conocido a Esther, una chica que estudió Económicas en Pamplona, como yo.

La vuelta en coche ha estado de lo más entretenida, charlando sin parar de distintas cosas. Pero también se nos ha ocurrido una idea de negocio, a ver si podemos llevarla a cabo. De momento, prefiero no decir nada por si acaso J

Y, para terminar, aquí os dejo una foto de Miriam celebrando el Día de la Hispanidad. Como se suele decir, "Al arbolito, desde chiquitito" Buenas noches.

Excursión a la Embajada

Me he despertado a las 6 de la mañana con la loca de mi hija riéndose a carcajadas en su cuarto. No sé qué cuernos estaría haciendo a esa hora pero, desde luego, se lo estaba pasando pipa ella sola. Cuando he salido de la ducha ya no la oía así que voy a su cuarto y compruebo que está frita otra vez. Menuda pieza.

Hoy toca ir de excursión a la Embajada de España en Abu Dhabi para hacer dos trámites: poner una reclamación para que actualicen mis datos en el censo electoral y pedir el visado para Osama.

Estamos de vuelta en Dubai sobre las 11:30, con un dolor de cabeza que me muero.

Hemos terminado el plan de medios para Disney, que lo tenemos que enviar hoy. Esperemos que el cliente nos responda pronto pues vamos muy limitados de tiempo. Sobre todo para producir el material de la idea que Isobar les presentó.

Llego a casa y la enana me recibe con una sonrisa de oreja a oreja pero Lakshmi no está muy contenta porque sólo ha dormido una hora y pico de siesta y sabe que nos dará la tarde otra vez. Me la he bajado al patio y hemos estado sentadas en el césped un rato. Se acercaban varios niños para jugar con ella.

A las 18:30 nos subimos porque ya es demasiado oscuro y no se ve un pimiento. Hemos charlado con los abuelos, que ya me han contado más cosas de la boda, se lo debieron pasar muy bien, ¡qué envidia!

A las 19:20 viendo que se estaba quedando frita en mis rodillas, la he metido en el baño. Estaba rota de sueño porque ni siquiera ha chapoteado con las manos, ni intentado coger la esponja, que la trae loca. De nuevo, se termina el biberón entre sueños pero, como es tan cabezota, cuando la meto en la cuna, empieza de nuevo a ponerse de pie, con lo agotada que estaba. Pero no ha durado mucho, a los 10 minutos ya no la oía.

Antes de dormir he comprobado que los cereales que compré ayer por internet, van ya camino del hotel de Emilie. Menudo favorazo nos está haciendo la roomie.

Tarde a todo correr

Madre mía cómo ha empezado la semana, sin parar. La mañana ha sido más o menos tranquila, sólo hemos tenido la reunión de status de todas las semanas.

He quedado a comer con Claudine en Merkaaz, que tienen un bufet muy rico por 50 dirhams, equivalente a unos 9-10 euros.

Después he ido con Wissam a dos reuniones en Philips, una con Avent y otra con Lumea. Nos hemos vuelto a la oficina con varias cosas por hacer. Termino lo más urgente y el resto lo dejo para mañana.

Salgo corriendo de la oficina porque hoy tengo que revisar las fotos que nos hicimos la semana pasada. Tengo que elegir como mucho 5 de 54, tarea dificilísima porque son todas muy buenas. Al final he escogido 3 de nosotros 3 y dos de Miriam sola, que está para comérsela, con esa cara de golfa que tiene siempre. He tenido grandes tentaciones de comprar más fotos pero es que cuestan una pasta. Aunque tenga un 40% de descuento, me sale cada foto a unos 120 euros, tiene tela. Lo malo es que ahora tardan alrededor de 6 semanas en tenerlas listas.  Pero nos dan todas enmarcadas según lo hayamos elegido. Como también nos las dan en formato digital (sólo esas 5), ya pondré alguna en el blog cuando las tenga.

De vuelta  a casa, he bajado con Miriam un ratito al patio. Se ha terminado quedando frita cuando estábamos a punto de subir. He estado charlando un ratito con Elena, que tiene a Miguel su hijo malito, pobre. No estaba como siempre, corriendo de un lado a otro sin parar, sino agarradito a su madre, pobrecillo.

Después de la rutina diaria, hemos cenado algo y yo me he ido a la cama mientras el pobre Osama se queda estudiando. Pero ya le queda menos y, al final, tendrá su merecido descanso. Hemos cerrado el viaje a Berlín para principios de noviembre, ¡qué ganas!

Fin de semana

Este fin de semana ha sido tranquilito. Ahora Osama está a tope estudiando para el examen y no podemos hacer muchos planes.

El viernes fuimos a comer a casa de sus padres. Miriam tardó lo suyo en dormir la siesta porque ahora está demasiado contenta con su nueva actividad: ponerse de pie en la cuna agarrada a los barrotes, ¡le encanta! Eso sí, cuando ha caído, ha estado roque dos horas.

Por la tarde, hemos dejado a Osama en casa estudiando y nostras nos hemos ido al Dubai Mall a hacer unos recados. Allí me he encontrado con Mahmoud, que le ha hecho mucho más caso a Miriam que a mí.

Después de cenar un pescadito al horno, nos hemos quedado fritos en el sofá viendo una película. Menuda juventud tenemos encima, jajaja.

Y el sábado, la terremoto amaneció a las 19:35, como una campeona. Osama estuvo casi todo el día encerrado en la oficina estudiando, sólo ha venido a comer.

Esta vez la señorita Kattan no ha querido dormir más de una hora después de comer. Ya sabía yo la tarde que me esperaba. Me la he llevado a la playa con Sabine y Benouit, que hacía mucho que les veía. Ha dado un poco la murga de puro cansancio que tenía encima. No estaba contenta ene l agua, raro en ella; tampoco en la toalla con sus patitos; así que sobre las 17:30 nos hemos vuelto a casa. Se ha quedado dormida llegando al aparcamiento y, aunque he esperado un ratito en el coche, se ha despertado en el ascensor. El resto de la tarde ha sido agotador. Todo le sentaba mal, lloriqueaba por cualquier cosa. Hemos charlado por skype con los ciber-abuelos y el padrino.

A las 19:40 ya no la aguantaba más así que le he adelantado el baño un pelín, que lo estaba pidiendo a gritos. Terminándose el biberón ya estaba en otro mundo y, por supuesto, ni se ha enterado de cuando la he dejado en la cuna, estaba totalmente frita.

Da gusto lo silenciosa que se queda la casa cuando la mica se acuesta. He aprovechado para organizar cosas. Y hoy no dejo de acordarme de mi prima Blanca, que se casa esta noche con Javi. Otra boda que me pierdo. Es una de las desventajas de la vida del expatriado, ¿qué le vamos a hacer?

Se fue el genio de la manzana

Me he quedado de piedra al oir la noticia de que Steve Jobs ha muerto. Por mucho que nos lo esperáramos, sobre todo después de que renunciara el pasado agosto, no termino de creérmelo. Me ha dado mucha pena pues él sí que cambió el mundo de la tecnología. Paradojas de la vida: mientras presentaban al mundo una de sus creaciones, él se iba apagando. En fin, que descanse en paz y mucho ánimo para su familia.

El día ha pasado volando. Primero hemos tenido una reunión de urgencia para preparar un documento que tenemos que enviar a Philips hoy mismo. La buena noticia es que, a pesar de estar en concurso, nos han confirmado que seguimos manteniendo la cuenta en Medio Oriente y África. Así que ya me quedo más tranquila.

A la 13:00 hemos tenido reunión con Disney para presentar la estrategia de la nueva campaña. Tanto a Randy como a Hannah les ha encantado la idea que ha presentado Isobar. Ahora sólo tenemos que hacer números para presentarles el coste final.

Mahmoud y yo salimos corriendo para llegar a la comida con Choueri Group, en un restaurante del paseo de JBR. Literalmente, he comido en 20 minutos porque tenía que correr a otra reunión, esta vez con Avent.

Cada vez que voy a las oficinas de Philips me encuentro a alguien de mi anterior trabajo, que comparten edificio con mi cliente. Esta vez ha sido Didier y María Cristina, una chica nueva que se ha incorporado al departamento de Relaciones Públicas. Hablando, resulta que va mucho por Jerez y tenemos conocidos en común.

Y terminamos el día con una reunión de equipo en la oficina. Se hace una vez al mes y Michael, el CEO, nos hace un resumen de los acontecimientos del último mes. Hoy se ha incorporado una nueva iniciativa: elegir al empleado del mes. Y este mes le ha caído a Shakir, el director de compras digital. La verdad es que se lo merece y mucho, es un auténtico profesional.

De camino a casa, me ha tocado atasco claro, a esa hora es tremendo y aún más siendo jueves. Así que hoy no he podido sacar a Miriam de paseo, pobrecita.

Estaba bastante cansada porque hoy no ha querido dormir la siesta. Y es que, como ha descubierto cómo ponerse de pie, pues no quiere perder el tiempo durmiendo. Al terminar el biberón y meterla en la cuna, lo primero que hace es ponerse de pie agarradita a los barrotes e inspecciona la habitación. Agotadora.

Nosotros nos hemos ido a unas copas que organizaban por la despedida de Joe, que se ha cambiado de agencia. Hemos estado un rato viendo a antiguos compañeros, lo hemos pasado muy bien. A ver el resto del fin de semana.  

 

Y presentaron el nuevo iPhone 4-S

Después de rumores y más rumores, se presenta el nuevo producto de Apple. No es el iPhone 5 como todo el mundo esperaba, incluida yo, sino una versión muy muy muy mejorada del iPhone 4. A mí, personalmente, lo que más me ha impactado ha sido SIRI. Pero también tengo mis miedos, pues creo que nos estamos volviendo cada vez más vagos. A veces me pregunto, con tanta tecnología alrededor, si Miriam llegará a escribir con lápiz y papel.

En fin, con respecto a mi día. Ha empezado con un loco queriéndome echar de mi carril en mi camino a la oficina. De verdad, aquí cada vez se conduce peor. Sin intermitente y sin ni siquiera mirar por el espejo, se ha lanzado al carril de su derecha echándome a mí al arcén. Increíble. Eso sí, he llegado a la oficina más despierta que nunca.

Aunque no he tenido ninguna reunión hoy, ha sido un no parar. Estamos a tope con la campaña de Disney, intentando cuadrar el presupuesto para que salga, que va a ser muy chula.

Hemos comido en el libanés de abajo. La comida está rica pero no iré más pues todos se ponen a hablar en árabe y me quedo más colgada que una percha. Lo mismo que me pasaba en el trabajo anterior.

Por la tarde, después de recoger a Miriam, hemos ido a pasar la tarde con Belén, una amiga, y Julia, su hija. Belén llegó en marzo a Dubai con su marido, Philip, su hija Julia y embarazada del segundo. Joaquín tenía demasiada prisa en salir pues nació a los 5 meses y medio de gestación y 600gr de peso. Gracias a Dios, todo ha ido bien y ahora ya pesa más de 4 kilos. Está hecho un torito, como lo llama su madre.  

Hemos estado un ratillo en la piscina donde he conocido a Bea, una española que lleva aquí dos años y tiene 3 niñas monísimas.

De vuelta a casa ha sido otro no parar: baño de Miriam, biberón y prepararle puré para los siguientes días. Antes de irme a la cama he hablado con mi prima Marta, que estamos intentando cuadrar el plan de noviembre, a ver si terminamos yéndonos a algún sitio. 

Tarde accidentada para Miriam

Hoy he empezado el día con una reunión inesperada. Mahmoud ha tenido un pequeño accidente de camino a la oficina. Gracias a Dios no le ha pasado nada, sólo se ha llevado un buen susto el pobre. Tenía una reunión a las 10:00 con un cliente nuevo y he ido yo en su lugar. La buena noticia es que el plan está aprobado. Está todo el mundo muy contento. Eso sí, hemos estado hasta la hora de comer, que salimos muertas de hambre. Antes de volver a la oficina, paramos a tomar algo rápido en un semi-italiano que hay abajo. Me he hartado de reír con las historias de Leila, menudo personaje.

El resto de la tarde ha sido un no parar, empezando con perseguir a Philips para conseguir que nos aprueben una mini campaña en Facebook. Son sólo $ 2,000 pero nos está costando la misma vida. Cuando ye creíamos que lo teníamos, nos han mandado la orden de compra en Dirhams, para tirarme de los pelos vamos.

Y, para terminar, una reunión interna para discutir la estrategia de la próxima campaña de Disney. Isobar nos ha presentado una idea muy chula, esperemos que salga.

Llego a casa corriendo para llevarme a Miriam de paseo. Antes de salir, al ponerle el clip del “cuelga chupete” (me acabo de inventar una palabra, ¿no?), le he cogido un pellizco en el pecho. Pobrecita mía, cómo le ha debido de doler, lloraba con el corazón encogido unos lagrimones… qué penita.

Una vez que se ha calmado, nos hemos ido al mall que tengo que comprarle bodies y pijamas. Ella ya iba la mar de contenta canturreando y charlando sin parar. Ahora no para de decir “Ta ta ta t ata ta” con diferentes entonaciones.

De vuelta a casa, hemos hablado con el ciber abuelo (en Jerez) y la ciber abuela (en Madrid) simultáneamente, lo que hace la tecnología. Pero, nada más colgar y justo antes de meterla en el baño, segundo golpe. Estaba gateando, como de costumbre, y se ha caído de boca al suelo. Le sangraba un poco el labio de arriba, debía tener un cortecito. Esto es un preámbulo de lo que le espera. Entre lo hiper activa que es y que, de momento, no le tiene miedo a nada, va a pegarse muchos golpes.

Después de acostar a Miriam, que ha tardado medio minuto en dormirse, hemos ido a cenar con Emilie y su hermana a Mango Tree. Es un restaurante tailandés en el Souk Al Bahar, con vistas a la famosa fuente. Vaya calor que hemos pasado. Todo sea porque Florance vea el espectáculo. La última canción que hemos visto ha sido Thriller, de Michael Jackson. Sin duda, la mejor de toda la noche, las demás no valían ni un duro.

Antes de dormir, una buena ducha, que debo oler a tigre de bengala. 

Reuniones sin parar

Otra vez tenemos fiesta a las 2:30 de la mañana. Nos ha salido una niña de lo más juerguista. Claro, así se ha despertado hoy a las 8 de la mañana, debía estar reventada.

En la oficina ha sido un día de reuniones y más reuniones. Empezamos con la revisión de Wissam, que ya lleva aquí tres meses.

Luego a otra con Philips y Tribal Fusion. Ha sido muy interesante y, poco a poco, parece que el cliente empezará a hacer más acciones en digital. Buenas noticias.

De vuelta a la oficina, leo los correos y, en seguida, llega Chadi, uno de los proveedores con los que trabajamos. Me cuenta las últimas novedades de su red de sites y las posibilidades para un futuro.

Pido una ensalada a Circle, recordando los viejos tiempos en Media Contacts. Como delante del ordenador mientras estudio distintas opciones para nuestro supuesto viaje a Estambul a principios de noviembre. Digo supuesto porque no tiene muy buena pinta, desgraciadamente. Los billetes de avión están por las nubes, con las 3 compañías aéreas que vuelan desde aquí. Para que os hagáis una idea, vale más caro que ir a Jerez en Navidad, que ya es.

Y a las 16:00 tengo la última reunión del día. Es interna y acerca de un nuevo estudio de mercado que está elaborando el departamento de investigación.

Vuelvo a casa lo más rápido que puedo pero, a esa hora, ya empieza a haber mucho tráfico, así que tardo unos 35 minutos. Vista la hora, las 18:00, decido bajarme a Miriam al patio para darle un paseo y entretenerla con otros niños. Y a las 19:00 nos tenemos que subir porque, además de hacer mucha humedad, ya no se ve ni torta. En casa la hemos entretenido como hemos podido porque a estas horas ya está muerta de sueño.

Después de rebañar el biberón, hemos hablado un ratito con el ciber-abuelo, que está de vuelta en Jerez. La ciber-abuela se ha tenido que quedar en Madrid por problemas técnicos con el coche.

Osama está ya en fase final de estudio, pues tiene el examen el 31 de octubre. Así que se queda en la oficina a estudiar, que está más tranquilo, sin distracciones. Yo sigo mirando opciones para Estambul, que nos apetece muchísimo el plan. No sólo por interés en la ciudad, que es preciosa y llena de historia, sino porque el plan es encontrarnos allí con Marta y Marcos. A ver si lo conseguimos. 

Sesión de fotos

Me he despertado a las 2 de la mañana. Resulta que Miriam tenía montada una juerga en la cuna con su osito y los chupetes. Encantada de la vida estaba, canturreando, riéndose sola y, cuando me ha visto entrar, se ha emocionado pensando que ya la iba a sacar para jugar con ella. Va lista vamos. Le doy su chupete preferido y me vuelvo a la cama. La oigo quejarse unos 30 segundos pero en seguida se vuelve a dormir.

Cuando ha sonado mi despertador, no me podía ni mover de la cama, reventada. Osama va temprano a la oficina hoy así que siempre anima no ser la única en madrugar tanto.

Me temo que esta semana no va a ser nada tranquila; tenemos un montón de reuniones previstas. Pero la buena noticia de hoy es que me han confirmado las vacaciones de Navidad. Nada más saberlo, he sacado los billetes, que ya estaban un pelín caros. Pero al menos nos vamos a pegar unas Navidades en condiciones, para compensar el año pasado.

He estado echando un vistazo al proceso de voto por correo, que tengo que hacer esta semana también.

A las 4 en punto me he largado corriendo a casa, hoy no puedo perdonar ni un minuto porque tenemos una sesión de fotos a las 5, regalo de Emilie. Recojo a Miriam y Osama en casa y nos vamos para el estudio.

Ha ido más divertido de lo que esperaba, la verdad. Miriam ha aguantado como una campeona, aunque una de las fotos que quería hacerle la fotógrafa no ha podido ser. Estaba metida dentro de una caja de madera y con un tul color beige alrededor. No le ha molado nada eso de estar encajonada, literalmente. También ha terminado agotada la pobre. La semana que viene iremos a revisar las fotos para elegir la que queremos. Pero, como siempre, es un cebo para luego gastarte más dinero porque no te dan las fotos, tienes que comprarlas una a una. La más barata son 200 euros nada más y nada menos. Por muy enmarcada que venga la foto, me sigue pareciendo un robo a mano armada vamos.

Ya en casa, la hemos entretenido como hemos podido porque estaba que se caía de sueño la pobre. Le hemos tenido que adelantar el baño porque se estaba quedando dormida sentada, qué lástima.

Aprovechando que hoy ha caído antes de lo normal, hemos visto una película que tenía muchas ganas de ver: Limitless.

Y colorín colorado, este día se ha acabado. 

Resumen del finde en el Royal Mirage

Aquí estamos de vuelta después de un finde estupendo en la playita. El viernes llegamos sobre las 3:30 y, mientras nos preparaban la habitación, le damos la merienda a Miriam y nos tomamos un té con unas pastitas.

Una vez deshecha la maleta, nos vamos a la playa un rato, que por la tarde hace menos calor. La verdad es que nos ha decepcionado un poco dos razones:

1. Al tener La Palmera enfrente, la playa se ha quedado en una bahía, es como un lago donde no hay corriente ninguna y el agua está estancada.
2. Es viernes y, con el buen tiempo, hay un montón de barcos anclados en mitad del lago que ha quedado y con la música a toda pastilla. Así que la playa privada ha perdido su significado totalmente

Pero a pesar de todo, Miriam se lo ha pasado en grande en al agua, para variar. Y, claro, ha caído reventada en la cuna. 

Nada más llegar la canguro, nos hemos ido a cenar. En principio, habíamos reservado en uno de los restaurantes pero, al ver que era un buffet que no nos encantaba, hemos cambiado a uno que se llama Celebrities. La comida estaba rica pero no ha podido ser más lento todo. No puedo soportar esta nueva tendencia en la que, en los restaurantes buenos, tienes que esperar unas 3 horas para cenar. No lo entiendo. No puedo soportar esta nueva tendencia en la que, en los restaurantes buenos, tienes que esperar unas 3 horas para cenar. No lo entiendo. Entre el aperitivo y el segundo plato, casi nos hemos quedado dormidos.

Hoy hemos amanecido a las 7:20 y, después de darle el biberón a Miriam, nos hemos ido a desayunar. Tras un intento fallido de hacerla dormir una horita, como todas las mañanas, nos instalamos un ratito en la playa. A las 10:30 empieza a hacer demasiado calor y nos movemos a la piscina. Allí, al menos, tenemos algo de sombrita y el agua está mucho más fresca.

Le hemos dado el puré allí mismo y nos vamos directos a la habitación, que nos la han dejado hasta las 3. La piscina agota a cualquiera, por eso dormimos la siesta los 3 a la vez, jeje.

Comemos algo rápido y, después de darle de merendar al terremoto, vamos al Dubai Mall, que hemos quedado con Ban allí. Una parte del mall estaba a reventar porque Eva Longoria tenía una sesión de firmas en Bloomingdale’s. Además, había una promoción de Braun con bailarines callejeros. Total que estaba todo hasta la bandera y con mucho ruido por todas partes.

Ya en casa, he deshecho la mini-maleta y hablado con mi hermano, que este fin de semana se ha convertido en propietario, ¡qué emoción!

Tenía intención de irme a la cama a la misma hora que la enana pero al final me he enganchado a una peli de Anthony Hopkins y Ryan Gosling, Fracture; no sé cómo la habrán traducido al español pero es muy buena.

Y ya estamos en Octubre, muy fuerte.