martes, 13 de septiembre de 2011

D. Luis Arturo Rábade

Nada más abrir el correo, me he encontrado con una noticia muy triste, mi profesor de marketing en la universidad ha fallecido. Me he llevado un gran disgusto, la verdad. A pesar de que era duro, disfruté mucho con sus clases y sus seminarios; fue el que despertó mi interés en el mundo del marketing, la publidad, los medios, etc. Que descanse en paz y mucho ánimo y fuerza para su familia y compañeros.

Mientras seguía acordándome de sus clases, he ido a leer las noticias sin acordarme que hoy no quería abrir ni un periódico para no saber el resultado de la final del US Open. Como aquí era muy tarde para verlo en directo (12 de la noche), lo dejamos grabando para verlo esta noche. Vaya cara de tonta se me ha quedado cuando, en portada, he visto la foto de Djokovic con el trofeo. Vaya racha que lleva el serbio, está que no hay quién lo pare.

En la oficina, el día pasa volando. Mi horario es de 7 de la mañana a 4 de la tarde. Las dos primeras horas son las más productivas, pues estoy sola en la oficina y puedo adelantar muchas cosas. A partir de las 9, empiezan a llegar mis compañeros y las 10 entran mails y llamadas a pares; es cuando empieza el no parar. Eso sí, como adelanté en las dos entrevistas, a las 4 en punto, me largo corriendo a casa. Es uno de los mejores momentos del día porque Miriam me recibe con una sonrisa que no le cabe en la cara.

Esta tarde no hemos ido a ningún mall. Como decía ayer, ha empezado la buena temporada, así que nos hemos bajado a la piscina un rato. En cuanto mete los pies en el agua, se pone como loca a mover las piernas, ¡le encanta el agua! Va como loca con su mega-flotador, con asiento incorporado, moviéndose a sus anchas por la piscina de niños. Cuando ya está arrugada como una pasa, la saco para irnos al jardín un rato, que cada día hay más niños. Primero hemos pasado por el supermercado nuevo que han abierto debajo de casa, para enseñarle a Lakshmi dónde está.
Lakshmi es la chica que nos ayuda en casa y se ocupa de Miriam mientras nosotros trabajamos. Menuda suerte hemos tenido en encontrarla, es un tesoro.

Antes de subirnos a casa, he conocido por fin a Elena, una vecina española. Tiene un niño guapísimo de un año y tres meses, Miguel. Su marido es francés así que hemos estado hablando de cómo estamos intentando criar a los niños en varios idiomas y de lo en serio que se toman aquí lo de elegir guardería. Parece que estamos educando a los futuros premios Nobel o algo así.

Ya en casa, hemos hablado con los abuelos por Skype mientras saltaba en su nuevo juguete: es una especie de arnés con un muelle y que cuelga del marco de la puerta. Ahí se ha pasado un rato dando saltitos como una rana.

Y a las 20:00 empieza el segundo mejor momento del día, cuando la baña su padre, le pone el pijama, le doy el biberón y a la cuna hasta mañana.

Nosotros cenamos algo tranquilos, vemos un poco la tele y, a las 22:30, yo estoy ya encamada, que me levanto a las 6 :-( Antes leo un poco de "El timo de la superwoman", un libro muy divertido que me ha dejado mi amiga Ale.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

María!!qué bien que vuelvas, tus fans te esperábamos!!!qué bien que hayas vuelto al trabajo, y que tengas ese buen horario! un besazo y enhorabuena por todo!!Celia.

María Ravina dijo...

Muchas gracias Celia! Eres de las incondicionales, eh? Un beso y estamos en contacto! Maria