jueves, 11 de diciembre de 2008

Despedida de Alain

De vuelta a la oficina, que esta semana ha pasado casi en blanco. No me encontraba del todo bien, al principio, pero ya me daba remordimiento quedarme de nuevo en casa.

El día ha estado más o menos tranquilo, haciendo un par de informes, la llamada semanal con la oficina de Londres para Credit Suisse y poco más.

No hemos tenido manakhesh, lo hemos cambiado por una comida de despedida de Alain, que en teoría hoy se va a la oficina del Líbano. Al final ha pospuesto su vuelo para el martes por la noche así que aún le tendremos tres días más por la oficina.

He salido directa a casa, he charlado con mis padres y chateado largo y tendido con Tomás.

A las 20:00 he bajado al salón de belleza que han abierto justo en la entrada de mi edificio. Había quedado con Emilie en probarlo haciéndonos la manicura y la pedicura. Ahí hemos estado como dos marquesas. Yo he terminado contenta pero Emilie estaba muy defraudada con las filipinas.

Luego ella se ha ido a hacer recados, que la pobre tiene visita de trabajo esta semana y, además, ahora le toca a ella estar regular con la garganta.

Nosotros nos hemos ido a cenar a Eau Zone, que siempre vamos a tomar algo pero nunca a cenar. No hemos comido mal, normal. Lo que me ha hecho gracia es ver un postre en la carta hecho con Pedro Ximénez, del mismísimo Jerez :-)

Se han unido luego Maan y Jafar a tomar algo y hemos estado charlando de negocios y modelos empresariales, muy interesante. Con estos ingenieros se aprende un montón, jeje.

Y a la 1.30 ya nos hemos despedido y cada uno a su casa. Que aún queda fin de semana por delante.

No hay comentarios: