Desayuno español

Genial, hoy nos hemos levantado a las 8:20. Claro, con tanta juerga que tuvo anoche en su cuna, debió terminar reventada. Mejor para nosotros.

Mientras yo preparaba el desayuno español, Osama se ha bajado al terremoto a dar un paseo porque en casa se aburre y no hay quién la aguante.

Es la primera vez que hago churros y, aunque suene mal, han salido riquísimos. Al final, sólo ha venido Krin, que es la que está loca por los churros en el fondo. Así que bien.

Acompanados de un chocolate y un buen zumo de naranja, vaya desayuno que nos hemos metido entre pecho y espalda. Aquí dejo una foto, que vale más que mil palabras.

A Miriam le he tenido que dar de comer un poco antes porque estaba muerta de sueño y, de hecho, ha caído en la cuna redonda.  

En cuanto se ha despertado, nos hemos ido a casa de Fadi, un compañero de Osama que organizaba una barbacoa en su casa. También ha venido Ramees y su mujer, Jasmine. Lo hemos pasado muy bien, son todos encantadores. Fadi y Rula, su mujer, tienen dos niños: Maan, de 3 años y medio; y Jude, de 8 meses. Maan no paraba de contarme cosas pero, como era en árabe, no entendía ni jota, jeje. Miriam se lo ha pasado en grande, con un montón de juguetes que le han sacado.

De postre, les he preparado un foundat de chocolate con la Thermomix, que no se creían que lo pudiera hacer en 10 minutos. Me encanta cuando la gente subestima mi súper máquina porque luego se quedan flipados. Creo que Ramees quiere una en su casa a la voz de ya pero a su mujer no le hace demasiada gracia; no entiendo aún porqué. A mí, desde luego, me facilita la vida enormemente.

Charlita con los abuelos antes del baño y, a las 19:45 en punto, estaba en remojo, que bastante falta le hacía después de subir y bajar el escalón del jardín de Fadi al menos 70 veces.

Después del biberón ha caído frita, hoy no ha dicho ni media palabra.

Y nosotros  hemos visto el programa del viernes y a dormir también. Osama tiene fiesta mañana, afortunado él.