A Ikea

Hoy ha estado el día de lo más productivo. He estado comprando los dos planes que nos aprobaron ayer, preparando una propuesta para Qatar, modificando la de Carrefour y una cosa de Mango la dejo para mañana.

Nuestro amigo el becario ha tocado ya fondo hoy; se ha estado tocando la nariz a dos manos. Y, para una cosa que le mando hacer, pringa a Salma, quien por cierto ha pegado un carrerón tremendo. El jueves los sentaremos para darle a cada uno su revisión: uno para que espabile y otra para que siga así.

Hoy he comido con Claudine, charlando de la vida misma. Y comentando la noticia a la que hacía referencia la semana pasada, ahora ya es público: Sujata, de Euro, se va. La verdad es que me alegro mucho por ella. Es una chica muy alegre y últimamente sonreía bastante poco. Eso siempre es mala señal.

La tarde ha estado parecida, haciendo cosas.

Al salir he ido con Osama a comprar unas cuantas cosas para su casa: tabla de plancha, plancha (que se ha quemado) y batidora (dejó de funcionar). Luego a cenar a un sitio nuevo en JBR. Se llama Kabab-ji y es de comida árabe. Ahora, por Ramadán, tienen un menú especial por sólo 85 dhs. (16 euros aprox.) que no hay quien se lo termine.

Para aprovechar el resto de la tarde, hemos ido a Ikea a por un sofá-cama. Así Ban, cada vez que duerma en su casa, no tiene que hacerlo en un colchón en el suelo.

A la vuelta, nos hemos pasado por Wafi, que estaban Omar, Getto, Alexis y otro amigo, Nick, fumando shisha en el patio. Se estaba muy agradable. Ese es el único sitio exterior donde se puede ir en verano. El techo está abierto pero tiene aire acondicionado, así que la mar de fresquito.

Y a las 23:30, de vuelta a casita a dormir.