viernes, 23 de enero de 2009

Viernes de relax

He amanecido a las 11:30, como está mandado un fin de semana. Me ha sentado divinamente. Además no me he despertado ni una vez, da gusto.

Primero, mientras desayunaba, chateaba con mi madre, esperando a que se uniera mi hermano, que hacía ya mucho que no coincidíamos los tres. Al rato, también se ha unido Osama, así que ha sido un pitorreo. Faltaba mi tía Blanca, que estaba trabajando pero me mandaba correos un poco picada y celosa. Ya hemos quedado para el domingo por la tarde.

Después de una gran ducha, he ido a casa de Osama, que hoy comemos allí. Hemos intentado terminar de ver Volver pero resulta que no está grabada del todo. Ban y yo casi lo matamos con la mirada, como si fuera culpa suya, jajaja. Como teníamos que ir a Spinneys para comprar un par de cosas, la hemos alquilado allí. No es que sea mi película favorita pero me da mucha rabia dejarlas a medias.

Hemos comido crema de tapines, que estaba un poco sosa pero muy rica. Y luego carne a la plancha, muy sano todo, jeje.

Luego de relax en el sofá. Fuera estaba diluviando. En principio habíamos quedado en dar un paseo con Laura, Dani e Ignacio pero, claro, el tiempo no acompañaba.

También se ha suspendido la fiesta de Nutella. Claro, era al aire libre, así que la han pospuesto para el fin de semana que viene. Había también una fiesta para despedir a Santi, un español que deja Dubai. Pero, con el tiempo como estaba, nos apetecía cine. Hemos ido con Dani y Laura.

La primera opción era Australia pero, una vez en la cola para comprar las entradas, nos dicen que los horarios de Internet no son correctos, no hay pase por la noche. Al final hemos terminado viendo Revolutionary Road, de Di Caprio y Kate Winslet. Un poco lenta, la verdad.

Y esto es lo que ha dado de sí el viernes. Un plan de lo más tranquilo, que lo necesitaba después de la semana movidita.

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