Cena Suiza

Olé, hoy hemos amanecido a las 8:15 de la mañana, y sin interrupciones nocturnas, qué gusto. Pero lo mejor es verla tan de buen humor, como siempre.

Mientras Osama se iba a comprar unas cosas para cocinar hoy, nosotras nos hemos bajado al patio a tomar el aire un rato. Ban ha venido temprano porque echa mucho de menos a Miriam, así que nos hemos ido las 3.

Últimamente debe estar pegando un estirón o algo porque come como una mula, se ha puesto de puré de verduras hasta las cejas. Y luego se lo ha estado pasando de escándalo ella sola en la cuna; la escuchábamos reírse a carcajadas, no sé si el osito de peluche cobra vida cuando cerramos la puerta, pero tenía una auténtica fiesta montada. Claro, luego ha estado frita hasta las 15:30, con lo cual nos ha dejado comer tranquilos. Osama ha preparado unas pechugas de pollo riquísimas y unas patatas deliciosas. Todo ello ha merecido una siestecita, aprovechando la calma.

Después de darle la merienda a la enana, nos hemos ido a dar un paseo a Safa Park. Pero hoy, al ser viernes, era otra cosa; demasiada gente. Pero al menos hemos dado una vueltecita.

Ha venido Emilie a casa un ratito y, después de acostarla, nos hemos ido a casa de Belén y Philip, que organizaban una cena suiza para agradecer el apoyo recibido cuando Joaquín nació a los 5 meses de embarazo. Hemos disfrutado de los productos suizos: salchichas, queso y chocolate. Muy rico todo.

A las 23:11 un vecino de la casa de al lado ha lanzado unas lámparas de esas que vuelan hacia arriba y se queman solas en el aire. Eran 10, me imagino que tenía planeado 11 pero le falló una. Como no, también se escuchaban fuegos artificiales a lo lejos. La verdad es que la fecha tiene su gracia pero no es para tanto, ¿no?

Al llegar a casa, Lakshmi casi me ha amenazado para que mañana no me levante temprano, qué maja es.