Nutella party

He dormido 9 horas, totalmente necesarias para recuperar la falta de sueño del resto de la semana. Hoy tocaba hacer trabajos en casa y algunos recados. Por fin he colocado las baldas que me faltaban en el armario y así he organizado toda la ropa. He limpiado, que también hacía falta y, después, he ido al Mall a comprar bombillas, una fregona para la terraza y la tarjeta de memoria para el móvil nuevo, que por cierto se me ha roto la pantalla, un pequeño arañazo.

Luego, hemos cambiado de Mall, al Deira City Centre con Laura y Osama porque queríamos mirar unas cosas en Gap. Al final, como es lógico, hemos caído las dos, jajaja.

De ahí empezaba la carrera y el estrés. Íbamos a una fiesta de Nutella en el hotel Mina as Salaam. De camino, nos hemos dado la vuelta para recoger a Susana, que llevaba una hora esperando un taxi, pobre.

En el coche, he llamado a Inesonga, que cumple 5 añazos ya, toda una señorita. Debía estar pasándolo pipa porque sólo insistía en pasarme a su padre, jajaja.

La fiesta bien, con un buffet de chocolate nada más entrar, un lujo. Había dos fuentes de chocolate, frutas, esponjitas, bizcochos, profiteroles, crepes, etc. Y, eso sí, miles y miles de tarros de Nutella. La condición para entrar era, además de estar en la lista de asistentes, llevar un bote de Nutella. Gran evento de marketing, por cierto.

El sitio era espectacular porque se veía perfectamente el Burj Al Arab, precioso. Hemos estado sentados en la playa charlando, como de costumbre. Era donde mejor se estaba. Después nos hemos ido un rato a la villa 47 a seguir disfrutando del jardín, nos lo hemos tomado al pie de la letra, jaja.