Al sastre

Hoy tocaba madrugar un poco para ir al sastre, a encargar el traje para la boda de mi prima. He ido con Emilie y dos amigas francesas, Marionne y Camille.

Aunque iba con un poco de miedo, he salido muy contenta. Es que yo sólo los he probado para copiar algo exacto, sin tomar medidas. Pero esta vez me lo tienen que hacer desde cero. Les he llevado la foto del modelo que quiero y les he comentado los cambios. Me he quedado muy tranquila porque incluso él me ha dado alguna idea y consejo, así que bien.

De camino a por las telas, hemos creído morir del calor, qué manera de sudar. Pero ya tengo todo. El día 15 me hace una prueba, a ver qué tal. Como aún tengo mucho tiempo por delante, hay márgen para corregir. Ya le he avisado que lo quiero perfecto.

Había allí una chica probándose su traje de novia, telita.

Ya de vuelta en Marina, he ido a recoger a Osama y al Mall a hacer unos cuantos recagos. Yo me he comprado ya los zapatos, que luego no los encuentro, así que va todo en marcha. Hemos ido a arreglar su teléfono, a comprar un par de cosas y para Sharjah.

Hoy su madre ha preparado una tortilla de patatas, muy rica. Y luego, Uns y yo íbamos a ir a cortarnos el pelo pero no tenían hora hasta las 22:30. Estos son los horarios de Ramadán. Así que lo hemos dejado para la semana que viene.

De vuelta a Dubai, yo estaba muerta de sueño; me he ido directa a casita, a dormir para empezar bien la semana.