miércoles, 30 de septiembre de 2009

Se acabó septiembre

Esta mañana me he levantado de milagro. El despertador me suena a las 7:30 pero me quedo remoloneando hasta las 8:00 mientras la alarna suena cada 10 minutos. Pues hoy, con el sueño, en vez de posponer lo he debido anular. Y a las 8:10 me ha despertado la llamada de Osama, menos mal. Aún podía estar yo en la cama.

Hoy le toca cumplir años a Omar, el director de compra. Pero lo ha intentado mantener en secreto, sin éxito claro, porque por la tarde le hemos sacado unos brownies para celebrar. Él iba diciendo que yo soy mayor que él, jajajaja.

He estado terminando el plan de Parisienne y gestionando los tres planes nuevos para BMI, que están ya produciendo las creatividades. Menos mal que nos libramos del trafficking esta vez, que lo hacen los de Londres.

También me tocaba contestar algunos correos de ayer aún. Qué cantidad de mensajes, por favor.

A mediodía, he comido una ensalada de pasta con Carlos y, de poste, una chocolatina de las que me mandaron ayer mis padres y hermano, ¡qué ricas!

Y el resto de la tarde, pues más de lo mismo. He salido sobre las 19:00, que ya es de noche totalmente, un bajón.

Me acerqué al Marina Mall a hacer un recadillo y he cenado allí con Emilie, en el japonés que han abierto nuevo. Luego se han unido Osama y Jad, un compañero suyo, y nos hemos mudado a Fridays, que los chicos necesitaban más comida.

Emilie se va mañana a París por trabajo, 10 días, así que la echaremos de menos.

Antes de dormir, he hablado con Laura y Dani, que ya están en su casa instalados.

1 comentario:

Unknown dijo...

María !!! Felicidades !!!!

Besos,
Amparo.