jueves, 1 de octubre de 2009

Menudo viernes

Hoy ha sido un no parar hasta las 21:00, que he cerrado la oficina con Joe.

El principal marrón ha sido de BMI; querían empezar la campaña este mismo sábado pero no consiguen aprobarnos las creatividades ni por casualidad. He estado todo el día ejerciendo de mensajera entre la agencia creativa y el cliente. Han terminado volviéndome locos porque, por parte del cliente, cada uno decía una cosa diferente. Ya se podrían poner de acuerdo a la hora de enviar las correciones, pues no.

No me ha dado tiempo ni de parar a comer, sólo me he tomado un manakhesh mientras comentaba unas propuestas con Houda, que son para la semana que viene.

Lo peor es que este fin de semana me va a tocar trabajar. El lunes tenemos presentación de la estrategia de Evian y cada día nos llega un mail con más información y requisitos.

A las 21:00 he salido con un hambre que me comía una vaca y reventada, con pocas ganas de cocinar y pensar qué quería comer. Así que, al llegar a casa, me he tomado unos cereales mientras hablaba con mis padres.

Luego he hecho unas espinacas a la crema que tenían muy buena pinta. Ha venido Osama a cenar y, cuando se ha ido, he estado hablando un rato con mi amiga María, por fin.

Y a las 00.30, a leer un ratillo y a dormir. A ver si mañana aprovechamos el fin de semana.

No hay comentarios: