jueves, 28 de enero de 2010

Más griego

Empieza el fin de semana. Aunque en la oficina han pedido manakhesh, hoy no lo he tomado, no tenía hambre. Luego, a mediodía, no me soportaba ni a mí misma. Tenía ganas de comer, pero no sabía el qué. He estado un rato viendo los diferentes menús hasta que se me ha pasado el hambre.


En parte, estaba mosqueada por la presentación de Chanel. He tenido que rehacer parte del análisis porque, como siempre, las de MPG no se aclaran y no paran de confundirnos.


He conseguido no salir muy tarde, menos mal. Y justo antes de irme, sorpresa, los de CNN nos regalan entradas para el torneo de golf. Lo contento que se va a poner mi hermano.


En casa, me he cambiado corriendo para ir a cenar al griego con Carlos y Ale, que se lo habíamos prometido hace tiempo. También se ha venido Ban.


Hemos vuelto a comer divinamente, como siempre. Yo el segundo casi no lo he probado, con el aperitivo ya me ha valido. A Carlos y a Ale les ha encantado, no es para menos. Según mi compañero, merece la pena la excursión. Y es que, claro, para él, está lejísimos.

Después de dejar a cada uno en su respectiva casa, he terminado mis pruebas de la DS y a dormir como un bebé, que estoy muerta.

No hay comentarios: