viernes, 30 de noviembre de 2007

Sin parar de correr






En la tónica de los fines de semana, no hemos parado de correr en todo el día.

Primero, me he bajado un rato a la piscina, porque me he levantado pronto y así aprovechaba el tiempo. Después, he recogido a Susana para ir a la playa. Allí hemos estado un rato, hasta que se ha nublado y empezaba a refrescar. Nos hemos duchado en su casa y, después, directas al Deira City Centre, de compras. Yo he arrasado en Zara :-) Me he comprado varias cositas de invierno, que cuando llegue a Madrid tengo que dejar la sandalia en el armario.

Menudo caos había en el centro comercial, ¡qué cantidad de gente! A pesar de haber ido a tiro hecho, las dos o tres horas no nos las quita nadie.

A las 19:00 empiezan a sonar los teléfonos con los planes para la noche. Nico nos ha invitado a una fiesta en el Kepkinski Hotel en honor de una cantante libanesa muy famosa, estilo Shakira. Bueno, la que tenía que haber venido al concierto de Teka y que nunca apareció.

El evento en cuestión empezaba a las 21:00, con lo que empezaba la maratón de todos los viernes. Dejo a Susana en su casa y, mientras, llamamos a Mustafá para que nos llevara al hotel. En principio, tenía que recoger primero a Susana y luego a mí, pero no lo ha pillado. Se ha plantado en mi casa y, claro, hemos perdido media hora. Al dejarnos en el hotel, se ha peleado con el botones, por poco se monta la marimorena. Ya nos hemos despedido de él, pues mañana se va a Egipto.

La fiesta, menos multitudinaria de lo esperado, ha estado muy agradable. Era alrededor de la piscina. Allí hemos estado con Saleh, Carlos, Pedro y su novia, Kim, y, Nico, por supuesto.

Después de un rato allí, hemos intentado ir al 360 pero había mucha gente, no hemos tenido paciencia para aguantar la cola. Así que nos hemos ido al Bar Zar, en Madinat Jumeirah. En la terracita charlando, que se estaba fenomenal.

La verdad es que estábamos todos cansados, yo especialmente. Vista la animación, nos hemos retirado a casa para irnos de excursión mañana al desierto con Saleh. Nos quiere llevar a hacer un picnic allí y cocinarnos pollo. Por lo menos, hacemos algo distinto, ya que no ha salido ni el viaje a Omán ni la excursión a Musandam.

No hay comentarios: