domingo, 18 de mayo de 2008

BRAVO Nadal

Empieza una nueva semana y, como de costumbre, con sueño. Los domingos por la mañana son mortales. Al fin y al cabo, es el equivalente al lunes en el resto del mundo.

En la oficina como siempre, sin ningún marrón especial a la vista, afortunadamente. Trabajando en el cierre de Air France, la campaña de Credit Suisse y una presentación que tenemos mañana con un cliente inmobiliario.

Hemos tenido reunión con Dubizzle, un portal de Internet con información de clasificados. Han venido JC y Kirstie, muy simpáticos los dos. Van a lanzar la nueva versión del site y nos han dicho que harán una fiesta en junio; bajo techo por supuesto, claro.

A mediodía, he ido a recoger mi coche, que estaba en BMW aún, me dio pereza recogerlo anoche. Ahí seguía intacto y con el mueble en el asiento del copiloto. Lo de la seguridad en este país es increíble, un gustazo. Y, por supuesto, el coche estaba abierto y con el iPod a la vista. Igualito que en España, que me habría durado 15 minutos.

De vuelta, en la autopista he visto lo que menos me podía esperar: ¡una oficina de Marina D'Or! Mis ojos no daban crédito, presente en Dubai. Lo que me he acordado de Sonia y su despedida de soltera, jajaja.

Mientras terminaba unas cosas antes de salir de la oficina, iba siguiendo por Internet la final de Hamburgo. Creo que ha sido un partidazo de Nadal contra Federer, ¡qué coraje no haber podido verlo! Cuando leo que ha remontado el primer set de 5-1 a 7-5, increíble. BRAVO por Nadal.

He estado hablando con mis padres por el tema del coche. También recibiendo consejos de Joe y Osama, que saben bastante del tema. Al final, como es sólo para un año y medio, no compensa ir a por uno nuevo, mejor uno de segunda mano. Así que he estado mirando en diferentes sites y, por la tarde, he ido a ver un Golf. El dueño es Pierre, un francés que se lo compró hace un año y 4 meses, está nuevo y con sólo 24.000 kms. Me ha acompañado Osama, que siempre tiene más vista que yo.

Rana, de la ofcina, también vende su coche: un Peugeot descapotable gris metalizado. Lo veré mañana también, por tener varias opciones. A ver por cuál me decido al final.

Por la noche, hemos ido a cenar a Le Classique, que nos habían hablado muy bien. Está en el Emirates Golf Club. El sitio es precioso y se come genial. En general, el índice calidad-precio es mucho mejor que en España. Se puede comer muy barato, en sitios más normalitos, y muy caro, en sitios donde la comida y el servicio son increíbles.

Cuando he llegado a casa he visto el mensaje de mi tia Pilar contándome la victoria de Nadal. Muchas gracias. De nuevo, una pena no haber podido verlo. En cuanto empiece Roland Garros, me acoplo a alguna casa con tele; lo saben los chinos.

Y esto es lo que ha dado de sí el domingo.

1 comentario:

Belen dijo...

¡Opto por el descapotable!