La que empieza a caer

Esta mañana me ha podido el cansancio, me he quedado dormida y he entrado en el segundo turno, a las 9.30. Total, voy a salir tarde de todas todas.

No he parado en todo el día, hasta las 20:45 que he salido. Por la tarde he tenido reunión con un soporte de marketing móvil. Interesante pero no sé hasta qué punto será exitoso. Georges estaba como muy emocionado con la idea.

A mediodía he tenido que ir a casa porque me había olvidado el disco duro allí. Última vez que voy a por él, menuda calina estaba cayendo. Lo peor de todo es que, cada vez que decía algo, alguien me contestaba: "Pero si aún no hace calor, en serio" Prefiero no pensarlo.
Como siempre, me ha costado la misma vida aparcar de nuevo en la oficina. Tanto que me han terminado poniendo una multa por haberlo dejado en donde se supone que no se puede, aunque había unos 10 coches más. Eso sí, la multa está entera en árabe, a ver quién la entiende, jeje.

Por la noche, he ido a cenar a casa de Laura y Dani, que no les he visto en lo que va de semana y el fin de semana estoy en Egipto. Han estado hoy en el médico y el peque pesa ya 2.4 kg, así está la pobre Laura de cansada.

Y a casita a descansar, que la tengo en la otra punta.