viernes, 15 de agosto de 2008

Mi primer brunch en Dubai

Como ayer terminé acostándome pronto, he amanecido a las 9:15. Aprovecho para poner la lavadora, limpiar el piso y ponerme al día de las Olimpiadas vía Internet.

A las 12:30 he ido al hotel Mina S'Alam, que Kim nos había invitado al cumpleaños de su marido. Primera experiencia de brunch en Dubai. La verdad es que ha estado muy bien; era un bufet con toda clase de comidas: árabe, japonesa, india, oriental.

Después a casa casi que a dormir un rato la siesta. He intentado ver el partido de Nadal pero lo han retrasado mucho. Así que, para no dormirme, he ido a mirar los hoteles para cuando vengan mis padres y mi hermano. Alucino con el estilo de Dubai. Van a tirar un hotel entero, el Oasis Beach Hotel, para hacer un edificio más alto, que ese se ha quedado muy antiguo y bajito para el vecindario. El hotel en cuestión tendrá unas 7 plantas y de viejo no tiene nada. Pero bueno, esto es Dubai y el resto del mundo está en recesión económica.

A las 19:00 he ido a Misa. Vaya leño ha soltado el sacerdote sobre la independencia India y Pakistaní. No sé muy bien qué tiene eso que ver con la Asunción de la Vírgen, así que he preferido desconectar.

De vuelta a casa, he seguido el final del partido de Nadal contra Djokovic a través de Internet, de infarto. Ha debido ser un partidazo. Pero ya tenemos medalla asegurada.

Por la noche, por fín, hemos hecho el plan de ayer: recibir a Giuseppe y empezar a presentarle gente. Cenamos en un mexicano en el paseo de JBR pero no nos ha gustado a ninguno. Después de cenar, le hemos llevado a ver la Palmera, dando una vuelta rápida en coche y, luego, a casa. No estaba yo para mucha juerga. No sé si el resto habrá ido al final a fumar shisha a algún sitio. Yo me retiro a mis aposentos.

1 comentario:

Belen dijo...

¡Bruja!...somos expertas en leer entre líneas...