martes, 11 de noviembre de 2008

Otra de Rayan

Hoy ha sido un día más o menos tranquilo en la oficina. Hemos tenido reunión con un nuevo soporte. Es una página web para imprimir cupones descuento de diferentes marcas. La idea en sí está muy bien pero no encaja con ninguno de nuestros clientes.

Nos seguimos congelando, pero de qué manera, es horroroso. Parece mentira que fuera haga 36 grados y dentro nos estemos muriendo de frío.

Después de comer hemos bajado a la tercera planta, a ver nuestra futura oficina. No lo he dicho antes pero Joe y yo, es decir, Media Contacts, nos tenemos que mudar abajo. En MPG va a entrar más gente y necesitan nuestro despacho. Va a ser una pena porque, entre otras cosas, perderemos mucho contacto con los planificadores. Es un anti-integración pero qué le vamos a hacer. El caso es que, con el frío que pasamos, hemos elegido por unanimidad la que tiene más sol. Espero que en verano no nos arrepintamos.

Sin ninguna duda, la anécdota del día la ha protagonizado Rayan. Se ha comido, literalmente, la puerta de su despacho. No podíamos parar de reírnos, jajaja. Al pobre le ha debido doler bastante, hasta se le ha hinchado la nariz. Con lo que se reía él cuando Pascale, una de Euro, se chocó por primera vez. Pues donde las dan las toman.

Luego he pasado rápido por casa para poner una lavadora. La plancha sigo sin tocarla, así me va. Este fín de semana, voy a decirle a la filipina que venga a echarme la mañana. Ha llegado a un nivel de descontrol que soy incapaz de resolverlo yo solita, jajaja.

Me he ido a casa de Ban y Osama a cenar y ver una peli, "Algo para recordar", que me ha dado un sueño tremendo.

En cuanto ha terminado, a casa a charlar un ratito con mis padres y mis tíos y directa a la camita.

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